Familiares, amigos y compañeros del subcomandante de Zona Valle, Roberto Méndez Arriola, asesinado el 14 de julio fuera de su casa en el fraccionamiento Lomas Altas, dieron el último adiós al oficial con una ceremonia solemne en la que le rindieron honores. El acto se llevó a cabo en la comandancia central.
Ahí, la esposa e hija de Méndez Arriola exigieron justicia y dejaron en claro que el oficial no tenía nexos con delincuentes.
El cortejo fúnebre arribó a la zona del monumento al policía caído, donde ya lo esperaban compañeros, quienes enfatizaron que Méndez Arriola tenía 23 años como policía municipal en Mexicali, sirviendo con honor, lealtad y valor, recordando los cargos que desempeñó y las zonas a las que fue asignado durante su carrera.
Autoridades municipales también estuvieron presentes en la ceremonia, incluyendo al director de la policía municipal de Mexicali, Luis Felipe Chan, quien externó sus condolencias a la familia y brindó un mensaje de despedida. Incluso, la alcaldesa Norma Bustamante solicitó a la fiscalía que a la familia de Méndez Arriola se le permitiera cremar el cuerpo.
Elementos de la corporación y agremiados a asociaciones policiales realizaron guardias alrededor del féretro, luego se hizo un pase de lista, finalizando con las salvas de honor. Después sonaron las sirenas de las patrullas mientras el cortejo fúnebre se retiró a la última morada del oficial.
Nota por Miguel Almaraz y Tere Mejía
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