Dos oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos se declararon culpables de colaborar con una organización criminal mexicana para facilitar el ingreso de drogas mediante sus carriles de inspección en las garitas de Tecate y Otay Mesa.
Los agentes Jesse Clark Garcia, de 37 años, y Diego Bonillo, de 30, inicialmente se declararon inocentes, pero tras analizar la evidencia acumulada por múltiples agencias, ambos cambiaron su versión y se declararon culpables.
La investigación, liderada por el FBI y dirigida por el equipo de Corrupción Fronteriza, comenzó luego de que autoridades descubrieran comunicaciones sospechosas por mensajes con emojis, además de patrones inusuales en sus cuentas y, sobre todo, tras una serie de mensajes detectados por las autoridades en 2023 que los vinculaban directamente con el paso evadido de autos cargados de drogas.
Se comprobó que operaron desde 2021 hasta febrero de 2024, utilizando ese sistema de emojis para avisar a los traficantes en qué carril estarían trabajando, y entonces permitir el paso sin revisión. Bonillo reconoció haber dejado pasar al menos 75 kg de fentanilo, 4.5 kg de metanfetamina y más de 1 kg de heroína. Ambos se beneficiaron con viajes, bienes de lujo y hasta proyectos inmobiliarios en México.
Garcia se declaró culpable el 8 de julio, enfrentando nueve cargos, mientras que Bonillo lo hizo el 28 de julio, justo antes de iniciar su juicio, con tres cargos. Ambos enfrentan cadena perpetua, con un mínimo obligatorio de 10 años de prisión. Las sentencias están previstas para el 26 de septiembre y el 7 de noviembre de 2025, respectivamente.
Nota por Austin Bueno
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